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¿Cómo cerrar ciclos de forma sana?

Regularmente cargamos sentimientos a los cuales nos apegamos sin importar que sean buenos o malos. Aquí te decimos como cerrar ciclos de forma sana .

Cerrar un ciclo no es olvidar, es llevar un cambio dentro de uno mismo para continuar con nuestra vida. El problema es que nuestra mente se queda atrapada en el pasado, truncando nuestro camino. Eso es a lo que llaman APEGO , un vínculo afectivo que nos ata a personas o cosas.

Cuando nos alejamos de eso o alguien, empezamos a recordar las cosas con cariño, todo lo bueno empieza a pasar por nuestra cabeza. Asimilamos la pérdida y la falta que nos hace, pero debemos de tomarlo como una experiencia para crecer y aprender.

Muchas veces ignoramos la situación y lo pasamos de largo, no nos damos cuenta que no estamos resolviendo una etapa difícil que en el futuro nos va a afectar. Aquí te decimos como terminar ese ciclo de una vez por todas.

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  • Reconoce tu culpa, pero entiende que no fuiste responsable

Cuando la historia es dura, nos castigamos por todo lo que “pudimos haber hecho o no”. De manera injusta nos arrepentimos y nos sentimos culpables. Pero todo esto ,es contrario a lo que deberíamos de sentir, la sensación debe de ser empática hacia nosotros mismos; entendernos como lo hicimos con aquellos que cometieron errores.

Es importante reconocer los errores que cometemos y saber las consecuencias que tomarán. OJO, una cosa es asumir tu culpa y otra es ir cargando culpas de otros.

  • Recordar sin aferrarse

Ya sea una relación amorosa, un conflicto familiar o enfermedad, siempre nos dejará un recuerdo bueno o malo. Pero lo peor que podemos hacer es fingir que nada pasó, no es manera de cerrar ciclos.

Las experiencias nos ayudan a crecer tanto de manera emocional como intelectual. Así que cargar con un recuerdo no es la mejor opción, puedes recordar desde la perspectiva del aprendizaje, sin aferrarte al recuerdo.

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  • Perdona pero no olvides

El perdón es difícil pero no imposible. Aprender a dejar los rencores es una habilidad que se alcanzarás tu solo. El rencor es un sentimiento que nos enferma y nos carcome, de ahí la importancia del perdón.

No podemos cambiar el pasado, así que comienza a tener empatía para comprender a los demás. No todos poseen la mentalidad para evitar lastimarnos o decepcionarnos.

Perdonar, pero no olvidar. No, no es resentimiento; cuando perdonas dejas atrás ese evento desagradable, sabes que sucedió pero ya no te duele y puedes recordar sin sentirte triste o enojado.

Al no olvidar guardas la experiencia como una enseñanza, así en un futuro no volverás a caer en el mismo error.

  • Déjalo ir

En algunos casos, rendirse una buena decisión. Como seres humanos intentamos racionalizar todo lo que paso, nos lleva a suponer y sufrir por cosas que nunca sabremos si fueron verdad.

Si intentas encontrar una respuesta a lo que pasó, te desgastaras y no te ayudará a cerrar un ciclo de verdad. Solo hay que dejar ir.

Siempre recuerda que la mala experiencia no fue innecesaria, siempre son para aprender y crecer interiormente.

Intentar responder todas las interrogantes que surjan de una pérdida o abandono es un trabajo que supondrá muchísimo desgaste.